Luego de una fuerte sesión de entrenamiento, los corredores suelen sentir un dolor muscular: ¿cómo distinguir si se trata sólo de una contractura o de algo más complicado como la tendinitis, que requiere un tratamiento específico?
Es importante aprender a diferenciar un dolor muscular de lo que comúnmente se conoce como tendinitis, aunque su término correcto sería tendinopatía. Esta patología involucra a todas las lesiones tendinosas, por ejemplo:
a) la tendinitis que significa la inflamación sólo del tendón;
b) la tendinosis que es una tendinitis crónica;
c) la tenosinovitis que es la afección del tendón y de la vaina que lo recubre
d) la entesitis que es la inflamación en el punto de inserción en el hueso.
La sintomatología de la tendinitis o tendinopatía es bien precisa. Se trata de un dolor local, en un punto específico, con aumento del tamaño del tendón, que empeora con el movimiento. Este dolor está cerca de articulaciones como el codo, la rodilla, el tobillo, la cadera o la muñeca y en un primer estadio duele en reposo y cede con el ejercicio. En una etapa más avanzada el dolor se manifiesta todo el tiempo.
Las contracturas musculares, en cambio, abarcan todo un músculo, dan una sensación de:
a) bloque duro,
b) duelen en todo el recorrido muscular.
Si bien algunas contracturas denominadas agujetas, que se producen por una acumulación de sangre en la vaina de los músculos por pequeñas rupturas, provocan dolores locales, también se presentan en el cuerpo muscular de un músculo.
Tendinopatías en los corredores
Las tendinopatías se dan principalmente en las rodillas y en el tendón de Aquiles. Sus causas suelen ser provocadas por sobreuso, es decir, movimientos repetitivos, algo característico de las carreras de calle y/o entrenamientos intensos. Otras causas tienen que ver con que, generalmente, los corredores entrenan en superficies duras o usan zapatillas desgatadas o con poca amortiguación.
Asimismo, el abuso de entrenamiento en pendientes o en terrenos irregulares, así como el calentamiento inadecuado también puede provocar tendinopatías. Algunas de estas causas o todas en su conjunto pueden llevar a un aumento de tensión en un punto específico y generar inflamación del tendón, que en una primera instancia se presenta como una pequeña molestia y con el correr del tiempo se incrementa.
Cómo atacarla
El tratamiento de la tendinopatía incluye, en principio, reposo de dos a tres días y aplicación de hielo durante 20 minutos varias veces en al día. En algunos casos, se recomienda el uso de férulas, masajes en el tendón, fisiokinesioterapia, manipulaciones, ejercicios médicos, vendajes funcionales, infiltraciones y los antiinflamatorios.
En los primeros días de la lesión, es conveniente que el paciente no realice estiramientos. Luego de superar esta etapa, se buscará la causa real de la lesión, por ejemplo, un movimiento inadecuado, para poder atacar el problema y erradicarlo por completo. Cabe destacar la importancia de evitar la cronicidad de esta patología porque puede generar la ruptura del tendón.
Consejos básicos para prevenir la tendinotapía en miembros inferiores
- Elegir un calzado adecuado en relación con el tipo de pisada y actividad a desarrollar
- Tratar de evitar movimiento repetitivos con un uso excesivo de las extremidades
- Realizar movimientos de calentamiento antes de correr
- Mantener todos los músculos fuertes
- Entrenar la flexibilidad de le músculos y tendones
Lic. Sergio Lemos
Especialista en Kinesiología Deportiva
Kinesiólogo de los seleccionados de Hockey sobre césped, femenino y masculino
Kinesiólogo del plantel de rugby del San Isidro Club (SIC)
Miembro de Asociación Kinesiología del Deporte (AKD)