Se demuestran beneficios aún con tiempos reducidos de entrenamiento.
Un estudio reciente publicado en “JAMA” tiene buenas noticias para aquellos que han estado evitando el ejercicio porque consideran que no tienen suficiente tiempo: incluso 10 minutos al día pueden mejorar la aptitud cardiovascular.
La investigación encontró que, cuando las mujeres sedentarias que tenían sobrepeso o eran obesas comenzaron a practicar un promedio de 72 minutos de ejercicio a la semana, aumentaron su consumo máximo de oxígeno en 4,2% en comparación con las mujeres que permanecieron inactivas. “Para las personas que han estado realmente sedentarias, el beneficio es casi inmediato. Levántese ya de ese sillón”, aconseja el autor principal del estudio, el Dr. Timothy Church, director del Pennington Biomedical Research Center en Louisiana. “La idea de que entre 10 y 15 minutos de ejercicio al día pudieran ofrecer beneficios en cuanto a la buena forma nos sorprendió”, añade.
Los investigadores también encontraron que aunque un poquito de ejercicio era beneficioso, más ejercicio mejoró la forma cardiorrespiratoria aún más. Church anota que la intensidad del ejercicio realizado por las mujeres del estudio era muy baja, probablemente el equivalente de caminar a una velocidad de 3 a 5 Km por hora.
Los autores comenzaron la investigación porque ha habido pocos estudios que hayan evaluado el efecto de respuesta a la dosis del ejercicio, es decir, cuánto ejercicio se necesita para ver un beneficio y si una mayor cantidad de ejercicio continuará produciendo beneficios adicionales. Para responder a esas preguntas, los investigadores reclutaron a 464 mujeres posmenopáusicas que se consideraba que tenían sobrepeso o eran obesas. Las mujeres tenían algún grado de hipertensión y ninguna hacía ejercicio al comienzo del estudio. Se asignó aleatoriamente a las mujeres a uno de cuatro grupos, el grupo de control que seguiría sedentario, un grupo de ejercicio ligero que en promedio hizo 72 minutos de ejercicio a la semana, un grupo de ejercicio moderado que hizo en promedio 136 minutos de ejercicio a la semana y un grupo de ejercicio frecuente que completó casi 192 minutos de ejercicio cada semana.
Se midió el consumo máximo de oxígeno de las mujeres al comienzo del estudio y otra vez tras seis meses de ejercicio. Encontraron que las mujeres del grupo de ejercicio ligero aumentaron sus niveles de consumo máximo de oxígeno en 4,2%. El grupo de ejercicio moderado experimentó un aumento de 6%, mientras que el grupo de ejercicio frecuente mejoró su aptitud cardiorrespiratoria en 8,2%.
“Esta es una gran noticia para los sedentarios y los que envejecen”, dijo Church. “Hay personas que no pueden alcanzar los niveles de ejercicio recomendados, pero ahora sabemos que si no puede hacer 150 minutos a la semana, hay beneficios de hacer aunque sea la mitad”.
JAMA 2007;297:2081–2091
(Jano Online)